abril 19, 2012

Fundación Wallenberg enciende vela en Día del Holocausto

Invitada por la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas, la Fundación Internacional Raoul Wallenberg asisitió al tradicional acto de recordación del Día del Holocausto y del Heroísmo, en el 69º aniversario del Levantamiento del Gueto de Varsovia. El acto tuvo lugar en el Teatro Coliseo.

Representando a la Fundación Wallenberg y a su fundador, Baruj Tenembaum, Eduardo Eurnekian, presidente de la ONG educativa, encendió una vela conmemorativa de los millones de judíos asesinados por el nazismo durante la Shoá (1933-1945).

El evento contó con la presencia del presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, quien dijo: “La Shoá ha sido un proceso, no un único acto. Ha sido un camino y por ese camino transitó el odio y el fanatismo, y por eso vemos que los perpetradores deben ser juzgados por la historia y también por la justicia. Es ese fanatismo, es esa discriminación, las que los llevó a la ceguera, a la locura y a la tragedia. Pero ese camino que llevó a la Shoá también transitó el odio. Ese odio que divide a los pueblos, que establece una suerte de ceguera sistemática. Por ese camino transitó la indiferencia. La indiferencia de todo un pueblo y de una humanidad, la misma que llevó a decir al principio que esos pequeños actos de discriminación no tenían ninguna importancia, que no tenían ninguna trascendencia porque le ocurrían a otros. «No es mi caso, no me va a tocar a mí o es de un sector que me es ajeno». Esa indiferencia no debió haber ocurrido.”

Por su parte, el embajador de Israel, Daniel Gazit, realizó una sentida evocación de los Justos entre las Naciones, con particular énfasis en la figura del diplomático sueco Raoul Wallenberg. Gazit se refirió al heroísmo representado por los Justos y afirmó: “Es un tema difícil de explicar qué es heroísmo y qué significa hoy. Nos preguntamos qué hubiéramos hecho nosotros en esas circunstancias cuando todo el mundo era negro y no se sabía qué hacer. Cómo decidir arriesgar la vida, luchar en contra de la corriente, de la multitud. Cada uno de nosotros podía tener ese coraje, ese heroísmo.

Nuestros sabios cuando definen al heroísmo se preguntan: «¿Quien es un héroe?», y responden: «El que domina su instinto, su deseo profundo».