Cientos de sobrevivientes del Holocausto, salvadores y liberadores asistieron a una conmemoración en Carnegie Hall

El 5 de febrero de 2007 cientos de sobrevivientes del Holocausto y liberadores, junto con las familias de varios salvadores, asistieron como invitados al concierto Partners of Hope (Socios en la Esperanza) en el teatro Carnegie Hall de Nueva York, en una de las mayores reuniones de este tipo llevadas a cabo en los últimos años.

El programa (en documento PDF), presentó oradores y músicos internacionales que honraron a aquellos salvadores que demostraron un extraordinario coraje al salvar judíos del Holocausto. Encabezando el programa estuvieron el cantante israelí David Broza, la soprano de origen búlgaro Anna Veleva, la actriz Eleanor Reissa y el estreno mundial de la composición orquestal de Robert Cohen, basada en la poesía de Hyam Plutzik, poeta judío americano y veterano de la Segunda Guerra Mundial, interpretada por la Westfield Symphony Orchestra y dirigida por el maestro David Wroe.

La comunidad de sobrevivientes y liberadores fue acompañada por estudiantes y profesores gracias a la generosidad de la Fundación de la Famila Goldwasser Plutzik. El concierto fue presentado por la Fundación Internacional Raoul Wallenberg, bautizada así en honor del diplomático sueco que salvó a cientos de miles de judíos de la deportación y la muerte en los campos de exterminio.

Durante la función hicieron uso de la palabra el Subsecretario de las Naciones Unidas, Shashi Tharoor, y el Embajador israelí ante Naciones Unidas, Dan Gillerman, quien le pidió a los sobrevivientes del Holocausto y a sus familias que se pusieran de pie, creando así uno de los más significativos momentos de la noche.

Abigail Tenembaum, de la Fundación Internacional Raoul Wallenberg dijo:

”En una audiencia llena de gente joven, los sobrevivientes pudieron comprobar de primera mano que sus historias han sido contadas a las nuevas generaciones quienes se encargarán de pasar el testimonio. Trabajando juntos pudimos llevar a cabo la importante promesa de muchos sobrevivientes, incluso en las puertas de su muerte: Nunca debemos olvidar.”